Un estudio de los Institutos Nacionales de Salud de EE. UU. (NIH) descubrió que el coronavirus puede persistir durante meses en varios órganos, incluidos el cerebro y el corazón. La versión preimpresa de la investigación se publicó el 20 de diciembre en el portal Research Square y aún no ha sido revisada por expertos.
Los autores del estudio analizaron muestras de un total de 44 muertes por el virus y detectaron «ARN persistente del SARS-CoV-2 en varios sitios anatómicos, incluidas regiones del cerebro»., hasta 230 días después del inicio de los síntomas ”.
En total, se encontró ARN del virus en 79 de las 85 ubicaciones anatómicas y muestras de fluidos corporales.
En particular, los científicos han detectado la presencia del virus en tejidos pulmonares y extrapulmonares, incluidos los cornetes nasales, corazón, riñones, ganglios linfáticos del mediastino, intestino delgado y glándula suprarrenal, entre otros.
“Nuestros resultados muestran colectivamente que aunque la mayor carga de SARS-CoV-2 se encuentra en el tracto respiratorio y los pulmones, el virus puede propagarse temprano durante la infección e infectar células en todo el cuerpo, incluso abundantemente en el cerebro”, anotaron los autores.
Ziyad Al-Aly, director del Centro de Epidemiología Clínica del Sistema de Atención Médica para Veteranos en St. Louis, Missouri, dijo a Bloomberg que el análisis de expertos de los NIH «podría ayudar a explicar por qué un COVID prolongado podría ocurrir incluso en personas que han tenido una enfermedad aguda leve o asintomática .
(Tomado de Cubadebate)
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