Entre pandemia y bloqueo, la ciencia cubana triunfó en 2020

Científicos, investigadores y académicos de diferentes campos del conocimiento han analizado, en diversos espacios, los principales temas en los que la ciencia podría incidir de forma más eficaz.

Se destacaron dos momentos semanales de discusión con el gobierno, el de la lucha contra COVID-19[mujer[feminine y el del Plan de Soberanía Alimentaria y Educación Nutricional; y también se destacó la necesidad de promover el vínculo entre organizaciones y universidades, lo que hizo posible más de 150 proyectos de impacto en los territorios y su desarrollo local.

Miguel Díaz-Canel Bermúdez, presidente de la República, pidió un cambio real en la mentalidad de los líderes sobre la importancia de poner la ciencia y la innovación en el centro de la gestión, y expresó reiteradamente el compromiso del Estado cubano con la comunidad científica.

Fomentar una cultura de innovación, fortalecer alianzas estratégicas, implementar instrumentos financieros efectivos para promover la base innovadora y tecnológica, trabajar en el futuro derecho de la ciencia, tecnología e innovación, y crear las condiciones de un sistema nacional de innovación, fueron algunos de los desafíos identificados. . .

En este viaje cobró especial vigencia el pensamiento del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, cuando expresó que el gobierno revolucionario necesita científicos e investigadores, porque es el momento en que todas las inteligencias deben pasar a primer plano. necesita más conocimiento. para asumir el trabajo en curso.

Los esfuerzos se vieron limitados en gran medida por el asiento estadounidense en la nación, que aun en medio de la crisis provocada por el nuevo coronavirus, continuó en su objetivo de asfixiar al pueblo cubano.

Según informó el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente del 1 de abril de 2019 al 31 de marzo de 2020, el bloqueo impidió a Citma cumplir con sus obligaciones financieras con 13 organismos internacionales.

También generó dificultades en las relaciones de correspondencia entre la banca cubana y la extranjera, lo que impidió que el Centro de Isótopos, perteneciente a la Agencia de Energía Nuclear y Tecnologías Avanzadas, cobrara alrededor de US $ 250.000 United (USD) por la venta de producciones.

A esto se sumaron las pérdidas de gastos por fluctuaciones en los tipos de cambio al recibir cada transferencia, por lo cual ya no se reconoció el equivalente a US $ 44.295,85.

La imposibilidad de acceder a la tecnología norteamericana dificultó la adquisición de equipos para la Compañía de Torrefacción y Comercialización CubaCafé, así como la importación de componentes para la doplerización de radares meteorológicos.

El gobierno estadounidense negó la aprobación del proyecto de apoyo a la reconversión de la fábrica cubana Frioclima, para introducir gases que no afectaran la capa de ozono ni generaran calentamiento global, y para un cambio en los prototipos de equipos chillers, refrigeradores de líquido usados en aire acondicionado.

Sin embargo, hoy se exponen logros irrefutables de la ciencia cubana, como la existencia de vacunas candidatas para el tratamiento de COVID-19, la creación de empresas de alta tecnología, parques y empresas de ciencia y tecnología, interfaz en universidades; así como otros en beneficio de todos los sectores de la nación.