La importancia y utilidad de los hogares infantiles en las entidades agrícolas cubanas fue resaltada por Julia Muriel Escobar, directora gerencial del Ministerio de Agricultura (MINAG), durante el primer taller de intercambio y construcción participativa para promover la igualdad de género en proyectos colaborativos.
En Cuba hay 16 hogares de niños, la mayoría en entidades agrícolas, informó, y una vez aprobada su constitución por resolución 58/2021 del Ministerio de Educación, llamamos a su proliferación, dijo la funcionaria.
Esta modalidad apareció en 1993 en cooperativas agrícolas y lugares donde no había jardines de infancia cercanos, informó JR María de los Ángeles Gallo, directora nacional de primera infancia del Ministerio de Educación (MINED).
Agregó que en la década de 2000 se alcanzó la cifra más alta con 38.
Hoy solo quedan 16 con un total de 453 niños en Pinar del Río, La Habana, Mayabeque, Villa Clara, Cienfuegos, Las Tunas, Holguín y Granma, aclaró.
La resolución 58/2021 especifica que el hogar de niños es una variante en los lugares donde no hay círculos de cuidado de niños; Brindan servicios a niños, hijos de madres, padres o tutores.
También requiere que, dependiendo de sus condiciones económicas, las entidades puedan destinar fondos para su apertura, mantenimiento y sostenibilidad.
Dadas las oportunidades de empleo que se abren sobre el terreno con las nuevas formas de gestión económica y la consolidación de antiguas entidades, la directora gerencial del MINAG indicó que su apertura constituye un medio de relevo a los padres a cargo de sus hijos. para que puedan dedicar el día al trabajo.
Es una oportunidad para mujeres y hombres que quieran y puedan trabajar en cualquier modalidad del sector agrícola, y debe proliferar por los beneficios educativos y profesionales que ofrecen, instó Julia Muriel.
Según el documento publicado en el Diario Oficial del 3 de junio de 2021, para solicitar la apertura de viviendas, las entidades deben realizar un diagnóstico económico y financiero de las reservas presupuestarias y asegurar que los ingresos cubran los gastos de la nueva institución.
La agricultura es el buque insignia de la creación de hogares infantiles. Uno de los primeros fue fundado en la empresa de mejoramiento genético Camilo Cienfuegos, en Pinar del Río, con magníficas condiciones materiales y un profesorado estable; en ese momento una veintena de niños se beneficiaron del cuidado de su educador y de la atención de la entidad.
Luego se produjo una encarnizada lucha en la unidad de producción cooperativa básica Batalla de las Guásimas, en San Antonio de los Baños, para mantener los servicios del hogar infantil allí construido, ya que obviamente había una falta de comprensión por parte de algunas de las organizaciones involucradas. Ambas experiencias deben ser tomadas en cuenta en el esfuerzo por que estas instituciones proliferen.
(Tomado de ACN)
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