La conversión tecnológica tiene un impacto positivo en el medio ambiente

El impacto que genera el uso de tecnologías y sustancias con bajo potencial de calentamiento global en la producción de espumas rígidas sobre el orden productivo y el medio ambiente, se expuso durante un taller sobre el Plan Nacional de Eliminación de Hidroclorofluorocarbonos (HCFC) en este importante sector. , así como las experiencias de las entidades beneficiarias en La Habana.

El evento fue coordinado por la Oficina Técnica del Ozono (OTOZ), el Centro de Gestión de la Información y Desarrollo Energético (Cubaenergia), entidad adscrita a la Agencia de Energía y Tecnologías Nucleares (AENTA), del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente ( CITMA).

f0033174
Después de siete años de implementar el proyecto Espuma, Cuba está eliminando gradualmente las sustancias que agotan la capa de ozono de la producción de espumas rígidas de poliuretano. Foto: Cortesía de OTOZ

El especialista de OTOZ, Ing. Reynaldo Alemán, presentó el informe final de los trabajos realizados desde 2014, fecha en que se inició la aplicación de este proyecto que lideró, orientado a proveer el uso de HCFC 141-. B en la producción de espumas rígidas .

La conversión de industrias con tecnologías innovadoras ha llevado a la eliminación del consumo de 13,35 toneladas de sustancias que agotan la capa de ozono (SAO), reemplazadas por otras sin SAO y con bajo potencial de calentamiento global, como el ciclopentano, que es un tipo de hidrocarburo. . Otra alternativa fue utilizar el poliol premezclado con agua.

Como criterio para incluir industrias en el proyecto, se tomaron en cuenta aquellas que utilizaron HCFC 141-b entre 2005 y 2010. como agente de expansión en sus procesos. Posteriormente clasificaron la Unidad de Negocio Base Lancomet (UEB), de la empresa Cometal, subordinada al grupo Gesime; la Empresa de Diseño Automotriz, y UEB # 5 Refrigeración Caribe, perteneciente a la Empresa de Refrigeración y Calderas, del Grupo Gelec.

Todos ellos residen en la capital cubana y sus producciones están destinadas a ser utilizadas como aislantes y como elementos constructivos, de ahí su utilidad en el sector comercial con todos los equipos de refrigeración y aire acondicionado, además del sector transporte con vagones, portacontenedores, y construcción, entre otros.

En Cuba, la producción se centra principalmente en paneles de espuma rígida para paredes, techos y cámaras frigoríficas, así como en la producción de envases para medicamentos y enseres domésticos.

Reynaldo Alemán recordó que entre las consideraciones que se tomaron en cuenta para aplicar las alternativas tecnológicas actuales, se encuentran aspectos como la sustentabilidad ambiental con potencial cero de agotamiento del ozono (ODP); bajo GWP (Global Warming Potential, por sus siglas en inglés, y alta eficiencia energética, además de ofrecer durabilidad, seguridad y facilidad de manejo del sistema.

El 98% de los $ 1,187,527 aportados al proyecto se destinaron a equipamiento tecnológico: «Tuvimos que reconvertir una parte importante de la industria», explicó el especialista, luego de haber mencionado cómo una gran cantidad de obras ya han beneficiado a los paneles producidos durante este proyecto. financiado por el Fondo Multilateral del Protocolo de Montreal.

Entre los ejemplos más destacados se encuentran las obras de la Zona Especial de Desarrollo Mariel, la infraestructura de alojamiento de la constructora con sede allí; el laboratorio de productos claros de la empresa Cuba Petróleo, el prototipo y planta de desarrollo del grupo Gelec, donde se fabrican respiradores artificiales, así como viviendas en La Habana y en la provincia de Santiago de Cuba., construcción de escuelas y ampliaciones de José Martí. Aeropuerto Internacional, por nombrar algunos.

Desde 2016, el sector de producción de espumas rígidas en este país caribeño solo ha utilizado materias primas que no contienen sustancias que agotan la capa de ozono. Por otro lado, desde mediados de 2020 utilizamos materias primas que no contienen sustancias responsables del calentamiento global.

En 1992, el gobierno cubano ratificó la Convención de Viena para la Protección de la Capa de Ozono y el Protocolo de Montreal sobre Sustancias que Agotan la Capa de Ozono. El Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA), a través de OTOZ, es responsable de la implementación de las acciones nacionales relacionadas con este tema.

f0033175
Los importantes cambios tecnológicos en el campo de la refrigeración y el aire acondicionado están ayudando a eliminar las consecuencias negativas que los refrigerantes tienen sobre el medio ambiente. Foto: Cortesía de OTOZ

El ingeniero especialista de OTOZ Armando Gómez Díaz brindó una actualización sobre el presente y futuro de la Enmienda de Kigali, que agrega hidrofluorocarbonos (HFC) a la lista de sustancias controladas bajo el Protocolo de Montreal. Cuba lo ratificó el 20 de junio de 2019, por lo que tiene la obligación de respetar sus compromisos

Al referirse al proyecto de espumas, el titular de OTOZ, Doctor en Ciencias Nelson Espinosa, destacó durante el evento que se trata de uno de los proyectos más exitosos realizados en Cuba en los últimos años, capaz de solucionar la problemática ambiental y productiva.

Esto significa que la isla da prioridad a la reconversión del sector de las espumas rígidas apostando por soluciones técnicas sostenibles y duraderas.

Ver también:

Cuba demuestra su convicción de contribuir a la preservación del medio ambiente